La elección del portal online o aplicación, escribir un buen perfil y animarse a organizar una cita cuanto antes, es básico para encontrar pareja
Si eres de las que está buscando pareja, amigo, compañero de café o simplemente alguien para tener al otro lado del Whatsapp para animar tus noches, hablemos. Nos sobran los canales para comunicarnos y sin embargo, todavía hay muchos que dudan sobre si utilizar internet para conocer gente, buscar pareja o simplemente, sexo. Hay opiniones de todos los colores y como todo, sí que están los que piensan que conectarse a la red, bajarse aplicaciones como Tinder, es de losers, psicópatas y hasta maridos que se la puedan estar pegando a su mujer en busca de una tarde de juerga o una aventura. ¡Horror! Pero, luego está toda esa gente que quizás, y solo quizás, tiene la esperanza de que, como ellos, es otro lugar más para conocer a gente y puede, encontrar a alguien interesante. Las probabilidades de que todos los astros se alineen, sea lo que esperabas, cómo esperabas y que encima, tengáis cosas que compartís en común, como en la vida real, todo es complicado pero posible.
Además, es importante distinguir cuál es el objetivo de cada uno. Si se quiere encontrar a un tío para una noche, claro que te puedes ir a un bar o salir de fiesta con tus amigas, seguro que tienes una cola esperando para que te lo lleves a la cama. Pero la aplicación y el mundo online te permite elegir, marcar tus reglas, tus límites, y decir qué quieres. Puedes mantener conversaciones diarias con perfiles que te parecen interesantes, y luego quedar con ellos y ver que no era lo que esperabas o buscabas o que simplemente se quede en un buen rato. Pero conozco mucha gente que ha encontrado novio en Tinder y que están, felizmente emparejados. Por qué no.
¿Cambiamos el sentido al romanticismo?
No hace falta basar nuestras relaciones a costa de las redes sociales o las plataformas de conocer gente o encontrar pareja, simplemente tenerlo en cuenta como un canal más, en el que te puedes meter un día, un rato, y nada más. ¿Por qué te negarías a integrar las nuevas tecnologías en asuntos del corazón si ahora estamos más conectados que nunca? El bando contrario afirmaría que no hay que rendirse por apostar por las habilidades personales de ligar, seducir, excitar a alguien, sin que haya una previa del mundo virtual. Pero, se puede cortejar igualmente en internet para luego llegar a lo físico, ¿o no? Aunque, sí que es verdad que casi todas las webs y aplicaciones de encontrar pareja se rigen por una foto (puramente físico), cuánto atractivo es esa persona para ti y cuánto tú lo eres para ella. Otras webs, te unen según tus gustos, aficiones, intereses y los algoritmos, hacen el resto. Llegados a este punto, no es que estemos perdiendo la magia, es que, una vez hemos decidido iniciarnos en este mundo o formar parte de él a ratos, ya hemos asumido que la magia, si viene, vendrá luego. El romance de amor a primera vista es más difícil en el mundo virtual, aunque sí puedes colarte de alguien que has conocido iniciando una conversación en Facebook. Las redes sociales se asocian más a encontrar pareja y las webs de contactos a relaciones sexuales.
El cara a cara
¿La clave del juego? El enfoque del -tema ligues online- es que hay que tomárselo como que internet es un apoyo, pero nunca debe ser sustituto al mundo real. Hay que salir a la calle, y quedar con la gente que vas conociendo a través de la red lo antes posible, disminuir las expectativas y ser tu misma. Internet es una excelente herramienta para seleccionar, descartar lo que no nos gusta y mejor hacerlo cuanto antes. Uno no sabe si alguien le interesa hasta que no le ha visto y ha pasado un tiempo con él, y eso solo puede hacerse cara a cara.
Ligar por internet, es un trabajo
Si quieres encontrar pareja online, mentalízate, hay que echarle horas. Ligar online lleva su tiempo y tiene también su cortejo: chatear, mandar SMS, conseguir el teléfono, hablar, enviar fotos, todo un trabajo que te quita muchas horas y al que tienes que dedicarte… El interrogatorio previo, pasar el filtro, sentirte a gusto hablando con alguien, responder a las preguntas, etc. Seguramente, es mucho más rápido conocer a un hombre un viernes por la noche porque te ahorras toda esa previa y vas al grano. Luego ya vendrán las preguntas. Pero así, tienes más probabilidades de “match” y vas descartando a la gente que no te acaba de funcionar. ¡Nunca digas nunca!